Nikosia. Homenaje a Bob

Coincidiendo con el fin del año pasado, tuvimos conocimiento de la triste e irreparable pérdida de un compañero de Radio Nikosia, «Jota», al que le dedicamos el primer programa del año, y en el que leímos escritos suyos y pusimos su música, así como los textos y los músicos y canciones que sabíamos que le gustaban.
Apenas hemos tenido tiempo de hacer un programa más desde entonces, cuando otro golpe fulminante de desgracia nos ha dejado sin otro amigo y compañero de Radio Nikosia, en este caso se trata de «Bob», un hombre joven como «Jota», sus recaídas le llevaban de ingreso en ingreso, pero me pareció una persona con una inocencia agradable y que siempre saludaba con una sonrisa fascinada. Parecía persona de pocas palabras pero no me cabe la menor duda que de una agitada vida interior, tanto que me parece que muchas veces se perdía en un mundo que tenía que empezar de nuevo a descubrir. Nunca olvidaré un día en el estudio de la radio, en un estado tranquilo pero en el inicio de un brote.
Como dice Mª del Mar Bonet, «estic cansat de tu, domini fosc…» («estoy cansado de tí, dominio oscuro…»).
Que la tierra te sea leve, Bob, y que tu mirada nos acompañe en cada uno de nuestros pasos en esos caminos de feroces abismos y almas mutiladas.

Nikosia. El Desarraigo

A veces nos sentimos más parte de un colectivo que de una familia. No encontramos los fuertes vínculos familiares, y sin embargo nos identificamos con las señas de identidad de quienes forman parte de un colectivo.
Buscamos referentes que nos permitan construir nuestra identidad, que nos ayuden a sentir seguridad y a que nuestra personalidad no se sienta frágil y quebradiza.
Para muchas personas el diagnóstico puede ser el desencadenante del desarraigo que sentimos, justificamos con el diagnóstico nuestra falta de apego y de sentimientos que nos vinculen a alguien. También puede suceder que nuestra identidad se empiece a reconstruir de nuevo desde la realidad de ese diagnóstico, y es la única manera desde la que empezamos a dar sentido y explicación a nuestra vida.
Hay situaciones en que es la propia familia la que no desea que entres a formar parte de ella, porque ese diagnóstico no entra en los planes de sus exigencias.
Y por debajo de todo eso, quizás debamos de preguntarnos por qué es tan importante encontrar sentido en nuestras «raíces», en la historia o la tradición familiar, como sin ella, nuestra vida no tuviese el mismo significado o fuese menos importante. Quizás no sepamos encontrar en nosotras aspectos que nos ayuden a comprendernos cómo somos, y necesitamos de una seguridad, de una historia gloriosa pasada que se tendrá que repetir en nosotras como lo hace la tradición familiar.
Y a todo esto, todas esas historias idealizadas que se remontan a un pasado heroico, quizás pudieran construirse desde una tradición muy diferente a la nuestra y en la actualidad una no necesite remitirse al linaje, pues el placer que necesitamos es tan inmediato como efímero y ya nada es para siempre, ni tan siquiera el gran amor de nuestra vida, sólo el dolor de la pérdida, puede ser nuestro más terrible compañero por toda nuestra existencia. Un dolor que es la marca de una soledad gravada en las entrañas, porque ese amargo dolor nos sale de la víscera más profunda, todo sentimiento. Y cuando duele, ya nada nos pertenece, ya nada es nuestro, ya nada nos podrá retener, como si nos hubiesen cortado las raíces de la vida.
Se me ocurre, que en esa búsqueda del mito familiar, es la necesidad de encontrarnos que formamos parte de ese mundo de padres y madres superhéroes y superheroínas, que no existen en ninguna parte salvo en los comics. Y al descubrir que el mito es falso, que somos demasiado humanos y que no existe la magia que transforma a los mundos en ideales, nos desencantamos de la vida, y de la escasa heroicidad de nuestros progenitores, por ser reales y frágiles como los sentimientos.

Nikosia «In memoriam» de Jota

Este Miércoles 12 de Enero, nuestro programa pretende hacer un homenaje a nuestro querido amigo y compañero «Jota», de cuya muerte nos enteramos el último día del año pasado.
Vaya aquí nuestro más sentido recuerdo para «Jota», y en este programa queremos que su contenido sea principalmente con música que él había compuesto o cantado, con sus escritos y con nuestros sentimientos, tanto hacia él, como hacia su recuerdo.
Va por «Jota» y por todas nosotras, para que tengamos bien presente y vivo su recuerdo y que sus canciones se vuelvan a escuchar recorriendo los pasillos del metro.
Sin lugar a dudas, este, nuestro primer programa del año, va a ser muy emotivo.